El prestigioso científico Nicolás Bazán ha impartido una sesión clínica en el Hospital Nacional de Parapléjicos en la que ha intercambiado conocimientos con los investigadores y facultativos del centro y se ha mostrado optimista a la hora de aplicar los avances científicos a la actividad clínica.
Según ha afirmado Bazán, fundador y director del Centro de Excelencia en Neurociencias de la Universidad de Louisiana, “se están creando mecanismos que nos van a permitir aplicar pronto todo el conocimiento científico en la actividad clínica”. El científico ha expresado su deseo de que se rompa la barrera que hay entre la investigación básica y la clínica, para poder trasladar los avances que se están produciendo en investigación hacia el paciente.
Nicolás Bazán ha dado a conocer a los investigadores y facultativos del Hospital Nacional de Parapléjicos las líneas de investigación que se están desarrollando en el Centro de Excelencia en Neurociencias de la Universidad de Louisiana, en temas de neuroprotección y regeneración nerviosa.
En este sentido, Bazán que es pionero en Neuroquímica a nivel mundial y un referente internacional en Bioquímica, ha iniciado su sesión explicando los nuevos mecanismos y enfoques que existen para entender la lesión medular, y la importancia de la capacidad que tienen el cerebro y el Sistema Nervioso Central de generar moléculas que sustentan la neuroprotección, la neurorrestauración y la neurorregeneración, tras un daño adquirido.
El doctor Bazán ha explicado las propiedades de diversas moléculas, como la Neuroprotectina D-1, derivada del ácido graso Omega 3 docosahexanoíco, que promueven el mecanismo protector de la médula espinal para evitar el avance del daño producido tras una lesión medular.
Según ha explicado Bazán, en el Centro de Neurociencias que dirige se han llevado a cabo estudios en la córnea que revelan la existencia de proteínas específicas que activan los mecanismos de protección y regulan la regeneración de los nervios. “Con este modelo, trasladado a la médula espinal, podemos precisar los detalles moleculares que inician la regeneración nerviosa tras una lesión medular”, ha aclarado el investigador.
Células madre como herramienta para la neurorregeneración
Tal y como ha explicado, cuando se produce un daño en el Sistema Nervioso Central “se desencadena una tormenta molecular que pone en marcha mecanismos que destruyen el tejido, pero al mismo tiempo, moléculas como los ácidos grasos Omega 3 se oponen a esa acción dañina”. Así pues, “si en estadios tempranos de la lesión se puede modular esa tormenta molecular, se puede proteger la médula; sin embargo, cuando se trata de un daño crónico, es necesario el uso de células madre para obtener resultados parecidos”, ha matizado el profesor.
Bazán ha explicado que uno de los objetivos es diseñar células madre que tengan habilidad protectora para que al aplicarlas puedan, o bien reparar las neuronas que están parcialmente dañadas, o reemplazarlas.
Referente mundial en la investigación en Neurociencias
Profesor de Oftalmología, Bioquímica, Biología Molecular y Neurología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Louisiana, en Nueva Orleans, Nicolás Bazán es, también, fundador y director del Centro de Excelencia en Neurociencias de dicha Universidad.
Ha trabajado en diferentes centros como la Universidad de Columbia, en Estados Unidos y la de Harvard, entre otras; tiene más de 700 originales publicados y cerca de 1.500 comunicaciones y abstracts generadas. Bazán es también autor de una veintena de libros y sus investigaciones han generado más de 30 patentes, lo que le convierte en un referente a nivel mundial en la investigación en neurociencias.
Su línea de investigación fundamental en la actualidad es la descripción de los docoxahexanoides para avanzar en el estudio del envejecimiento; en lo que él cataloga como ‘envejecimiento exitoso’ y ‘envejecimiento fallido’.
Bazán es un referente mundial en investigaciones sobre Alzheimer, Parkinson y ceguera que le llevaron a estar nominado al Premio Nobel de Medicina en 2011.