El director gerente del SESCAM, Alberto Jara y la directora general de Planificación, Ordenación e Inspección Sanitaria y Farmacia de la Consejería de Sanidad, Carmen Encinas, han visitado el Hospital Nacional de Parapléjicos para conocer los nuevos avances del grupo de investigación emergente de Fisiopatología y Medicina Regenerativa para el desarrollo de estrategias en la reconstrucción y la reparación de tejido de la piel perdido tras una herida por presión
El Plan de Salud de Castilla-La Mancha Horizonte 2025 reconoce la investigación en Ciencias de la Salud como una actividad clave para mejorar la calidad de la asistencia sanitaria y para conseguir cambios innovadores en la tecnología y los procesos utilizados en la misma.
En este sentido, se han dado pasos decididos para avanzar en la estrategia de medicina de precisión y de terapias avanzadas, y para consolidar actuaciones en un marco estratégico, de intensa transformación y de apoyo a los profesionales sanitarios para la generación de conocimiento, en todos los ámbitos, lo que ha culminado con la publicación del Plan de Investigación e Innovación en Ciencias de la Salud de Castilla-La Mancha.
La apuesta del Gobierno de Castilla-La Mancha por avanzar en un plan estratégico de terapias avanzadas está dado sus frutos y el Hospital Nacional de Parapléjicos cuenta con el grupo de Fisiopatología y Medicina Regenerativa, que dirige el doctor Rafael Moreno Luna, cuyo trabajo científico se centra en la utilización de las células madre mesenquimales y endoteliales con potencial terapéutico para la reconstrucción y la reparación de tejidos.
El doctor Moreno-Luna ha explicado a los directivos de la Consejería de Sanidad cómo están llevando a cabo una investigación traslacional que, centrada en el paciente, estudia los mecanismos moleculares y celulares implicados en la regeneración del tejido tras una herida por presión.
“Para lograr este propósito, adoptamos dos enfoques complementarios, en primer lugar, investigamos la fisiopatología de la lesión para comprender las causas subyacentes de la pérdida de tejido y el estado de las poblaciones celulares del paciente. Este conocimiento es esencial para diseñar estrategias de intervención terapéutica efectiva y segura. En segundo lugar, basándonos en los datos preliminares obtenidos, tratamos de desarrollar protocolos eficaces y seguros para la regeneración y curación de estas heridas”, ha apuntado.
La investigación dirigida por el doctor Moreno-Luna, que recibe el respaldo por parte de la Consejería de Sanidad y del SESCAM, tiene como objetivo inmediato acelerar el avance de la investigación preclínica hacia el diseño y preparación de una estrategia basada en células para llegar a un ensayo clínico que valide tanto la eficacia como la seguridad del tratamiento propuesto, involucrando a pacientes con y sin lesión medular.
Por otra parte, pretende avanzar para conseguir la autorización de uso de medicamento de terapia avanzada de fabricación no industrial, seguir generando conocimiento sobre el medicamento para el beneficio de los pacientes y de la sociedad e intentar conseguir la autorización centralizada.
“Los resultados de las investigaciones son muy esperanzadores y ahora el grupo acomete retos de diversa índole, desde cómo combinar eficazmente el efecto de las células mesenquimales y endoteliales, pasando por encontrar una matriz, un hidrogel biocompatible con los tejidos humanos que sirva de andamio para promover efectos regenerativos, analizar todo tipo de cuestiones de seguridad y efectos secundarios o promover la implicación de equipos multidisciplinares que impulsen el proyecto”, ha afirmado el científico Moreno-Luna.
Reconocimiento y apoyo financiero
En 2018, el grupo de investigación ya recabó fondos competitivos del Instituto de Salud Carlos III, organismo dependiente del Ministerio de Sanidad, para el proyecto original cuyo objetivo consistió en validar la existencia de células madre mesenquimales y endoteliales con potencial terapéutico en pacientes crónicos con lesión medular y úlceras por presión.
Desde entonces, esta investigación ha obtenido cofinanciación de diversas instituciones públicas autonómicas, nacionales y europeas. Actualmente, cuenta con el respaldo de la Consejería de Sanidad y del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, así como de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y desde 2024, de la Agencia de Investigación e Innovación de Castilla-La Mancha, INNOCAM-2024.
“Que las instituciones más prestigiosas de España apuesten por un proyecto de investigación del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha a lo largo de los últimos cinco años nos anima y refuerza en el compromiso con esta línea de investigación centrada en mejorar la calidad de vida de los pacientes”, ha concluido Rafael Moreno-Luna.
El impulso a la investigación promovida por el Gobierno de Castilla-La Mancha tiene un objetivo claro apostar por la investigación e innovación de excelencia con los más altos estándares de calidad y aplicar lo antes posible los resultados de la investigación en la práctica clínica para beneficio de la sociedad.