Fuera de servicio

Milagros López VernetPor: Milagros López Vernet

He entrado y me he ido directamente al fondo de la tienda de animales. Ya sé dónde está el ascensor-montacargas para ir a la planta de arriba, la de la sección de gatos. Mi disgusto fue ver el cartel “Fuera de servicio” pegado en la puerta. Yo no puedo subir las escaleras así que doy la vuelta para irme, no sin antes comentar a uno de los empleados la situación del ascensor.

“Sí que funciona, el cartel es para que la gente no lo use sin necesidad”, esa fue su respuesta. Así que, di la vuelta, cogí el ascensor e hice mi compra.

¿Y por qué se llega a la situación de tener que mentir para que la gente respete el uso de un ascensor? El uso irracional de ese ascensor conlleva más averías y mantenimiento así que han tendido que poner ese “Fuera de servicio” para que no haya abuso y lo usen las personas que de verdad lo necesitan.

¿Tanto cuesta subir unos escalones? A mí me gustaría poder cansarme de subirlos, pero por el contrario me canso de verlos.

Porque a parte de ese exceso de uso y por lo tanto mayor riesgo de averías y que de verdad llegue a estar fuera de servicio para quien es necesario, también conlleva la situación de que cuando se necesita está ocupado con quienes no lo necesitan.

Y pongo un ejemplo vivido en diversas ocasiones también en otro centro comercial:

Tras 20’ de espera delante del ascensor en el parking del centro comercial un fin de semana cualquiera y acompañada en esa espera de unas cuantas personas más a mi alrededor, oigo “vámonos por la cinta mecánica que ya estoy cansado de esperar”.

Y se van quejándose por el tiempo perdido en la espera del ascensor para subir a una planta a la que llegarán en un momento utilizando la cinta. Mientras, yo sigo esperando otro largo rato hasta que por fin el ascensor queda libre del resto de gente que, al igual que ellos, han querido usar el ascensor porque parece que la cinta no les parecía solución para desplazarse entre plantas.

Otros tenemos las piernas fuera de servicio para poder usar esas alternativas al ascensor que el resto han decidido por voluntad propia no usar.

El otro claro ejemplo de “fuera de servicio” es el tener que pedir la llave de un wc adaptado. Muchas personas con discapacidad se quejan de tener que pedir esa llave para hacer uso de un wc, pero hay que ser conscientes de que sin esa llave, en vez de perder el tiempo yendo a pedirla, estaríamos perdiendo el tiempo esperando a que alguien sin discapacidad saliera del wc adaptado al que ha entrado porque era más grande y le parecía más cómodo.

Ya no digo nada de la limpieza conociendo la costumbre de orinar de pie de mucha gente en los wc públicos, costumbre nada compatible con nuestra necesitad de sentarnos en el wc

Así que, yo no me quejo de pedir una llave, me quejo de que haya que ponerla porque si ese wc adaptado no está “fuera de servicio” para otros, nos lo vamos a encontrar “fuera de servicio” para nosotros.

Mientras haya personas que no respeten el uso preferencial de ciertos servicios, la comodidad propia prime sobre las necesidades de los demás o de que tan siquiera seamos conscientes de que existen servicios porque hay personas que los necesitan más que uno mismo, seguirán existiendo esos “fuera de servicio” falsos y obligados para que los que sí necesitamos de ellos para poder hacer nuestra vida diaria con normalidad los tengamos disponibles cuando queramos.