‘Salta seguro’ es el eslogan que usará este verano de 2017 el Hospital Nacional de Parapléjicos, para su habitual campaña destinada a prevenir las lesiones medulares provocadas por una mala zambullida.
Según datos de la Dirección Médica del centro, un total de tres personas han ingresado entre los meses de mayo y junio, dos varones de 39 y 19 años y una mujer de 23 años, todos ellos con lesiones cervicales que provocan una tetraplejia. Las comunidades autónomas de origen de estos pacientes fueron Extremadura, Valencia y un militar herido mientras realizada actividades de ocio en Bagdad (Irak).
Como incide el mensaje de los profesionales del Hospital Nacional de Parapléjicos, para prevenir esta realidad recurrente cada verano la clave está en la prudencia. En consecuencia, la campaña de este año destinada a la prevención de este tipo de lesiones tiene como eslogan: ‘Salta seguro’, un consejo que, como todos los años, pretende contribuir a que los ciudadanos disfruten de un verano saludable.
En este sentido, el Hospital Nacional de Parapléjicos usará sus redes sociales, Facebook y Twitter @HNParaplejicos, para la difusión de los mensajes de prevención utilizando los hashtag ‘#Zambullidas2017’ y ‘#SaltaSeguro’, junto con el de ‘#VeranosaludableCLM’.
Además, tanto los ayuntamientos como los particulares que lo deseen podrán disponer del cartel de este año con mensajes preventivos para imprimirlo en alta calidad y ubicarlo en piscinas públicas, en las de las comunidades de vecinos, en playas y en zonas de baño de toda España.
El cartel se puede encontrar e imprimir en alta resolución en la web del Hospital Nacional de Parapléjicos http://hnparaplejicos.sescam.castillalamancha.es y en www.infomedula.org.
A este tipo de campañas de prevención de lesiones medulares por zambullidas, que el Hospital Nacional de Parapléjicos lleva lanzando desde hace más de doce años, se han sumado este verano diferentes entidades y asociaciones de personas con discapacidad.
Llamamiento a la prudencia
Profesionales del Hospital de Parapléjicos recuerdan la importancia de conocer la profundidad de una piscina, un río o el mar, sobre todo en relación con la altura desde la que uno se lanza. En todo caso, el bañista ha de zambullirse con los brazos situados en prolongación del cuerpo, protegiendo así el cuello y la cabeza.
Si el agua está turbia y no hay visibilidad conviene inspeccionar previamente la zona para comprobar su profundidad y que no haya elementos sumergidos como rocas, árboles u otros objetos contra los que se puede impactar.
En lugares como ríos, lagos, playas o embalses los niveles del agua pueden variar de un día para otro por las mareas, aperturas o cierres de compuertas, por lo que es conveniente comprobar siempre la profundidad.
Otra recomendación es no saltar de cabeza desde demasiada altura, pues una mala técnica de entrada puede causarnos lesiones tan solo golpeándonos con el agua.
En el mar, si el bañista se lanza de cabeza contra las olas debe comprobar que la profundidad después de la ola es suficiente. En cualquier caso, sólo es aconsejable zambullirse cuando la seguridad sea completa.
Por otra parte, en caso de que se produzca un accidente, y ante la necesidad de la recogida y manipulación de la víctima, es muy importante inmovilizar el cuello, evitar movimientos de la columna y avisar a un profesional para que realice el traslado. No se debe transportar al lesionado en un vehículo utilitario.